El director de Inteligencia Nacional (DNI, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos, John Ratcliffe, ha asegurado este miércoles que han detectado intentos de influir en la opinión pública ante las próximas elecciones presidenciales por parte de Irán y Rusia, que habrían obtenido información sobre votantes estadounidenses.
Esta obtención de datos de registro de votantes "puede ser utilizada por actores extranjeros para intentar comunicar información falsa a los votantes inscritos para causar confusión, sembrar el caos y socavar su confianza en la democracia estadounidense", han puntualizado Ratcliffe en una comparecencia de prensa acompañado del director de FBI, Chris Wray.
No obstante, ha enfatizado que los sistemas electorales de Estados Unidos son resistentes y que los votos "están seguros", y ha añadido que el país está preparado para tomar acciones contra "aquellos que son hostiles a la democracia".
Wray ha señalado que el FBI está trabajando con otras agencias federales, estatales y locales, así como con compañías de tecnología y redes sociales privadas, para mejorar la seguridad y detener cualquier amenaza que ponga en peligro los próximos comicios del 3 de noviembre.
Ratcliffe ha explicado que, presuntamente, Irán se habría hecho pasar por 'Proud Boys', un grupo de extrema derecha, en una campaña de correos electrónicos y habría iniciado una campaña de difusión de noticias falsas sobre fraude electoral a través de un vídeo enlazado en los correos enviados, según detalla la cadena de televisión CNN.
Según el funcionario, la campaña de Irán busca dañar al presidente y candidato republicano, Donald Trump, ya que los correos advertían y amenazaban a los destinatarios "¡voten por Trump o de lo contrario...!".
En cuanto a la presunta injerencia de Rusia, que ya fue acusada de interferir en las elecciones de 2016 para ayudar a Trump, no se ha detallado cuál era su intención, aunque sí existe la preocupación de que haya accedido a los datos de forma similar.
Por su parte, los demócratas y un grupo de exoficiales de inteligencia han acusado a Ratcliffe de desclasificar selectivamente documentos en el período previo a las elecciones para ayudar a la campaña de Trump.
"No escuchen a Ratcliffe. Pirateo partidista", han escrito en su cuenta de Twitter los demócratas del Comité de Seguridad Nacional, mientras que el presidente y candidato republicano se ha hecho eco de la noticia en Twitter resaltando que "Irán ha tratado de perjudicar a Trump".
Mientras que el portavoz de la Casa Blanca, Judd Deere, ha considerado que la conferencia de prensa y la información proporcionada es un ejemplo de Trump poniendo "América primero".
"Ha dirigido al FBI, al Departamento de Justicia y a las agencias de defensa e inteligencia para monitorear proactivamente y frustrar cualquier intento de interferir en las elecciones de Estados Unidos, y debido al gran trabajo de nuestras agencias al aplicar de la ley hemos detenido un intento de los adversarios de Estados Unidos de socavar nuestras elecciones", ha subrayado Deere, según informa la CNN.